martes, 30 de octubre de 2012

Huracan Sandy

La llegada a tierra del huracán Sandy esta noche dejó al meno 33 muertos en Estados Unidos y Canadá, varias zonas costeras del noreste estadounidense bajo las aguas, 8 millones de personas sin electricidad y sumió en la parálisis un área de unos 1.600 kilómetros. La cifra de muertosaumenta rápidamente después de que el alcalde de Nueva York, Michael Bloomberg, elevase a 10 los fallecidos sólo en la ciudad de los rascacielos.


El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ha declarado «zona catastrófica» las áreas de Nueva York y Nueva Jersey tras el paso de Sandy, lo que permite liberar fondos federales para ayudar a las víctimas.


La rotura de un dique en el Condado Bergen, de Nueva Jersey, causó la inundación de tres localidades. Jeanne Baratta, portavoz del Condado, dijo a la cadena CNN de televisión que las autoridades se han movilizado para socorrer a un millar de personas damnificadas en el área, ubicada unos 30 kilómetros al norte de Manhattan. La policía estatal de Nueva Jersey dio el primer aviso de rotura del dique en la localidad de Moonachie y la inundación se extendió a las localidades de Little Ferry y Carlstadt.


Sandy tocó tierra al sur del estado Nueva Jersey sobre las 20 hora local, donde dejó ciudades anegadas, olas gigantes y fuertes ráfagas de viento de hasta 150 kilómetros por hora que prometen convertir este huracán en uno de los más fuertes y extensos que han impactado jamás en la zona.


Redominado por el Centro Nacional de Huracanes como un «ciclón postropical», nada más tocar tierra la depresión perdió la rotación y la energía que le proveía el Atlántico, pero durante toda la noche azotó la costa este de EE.UU. con dureza.


Los efectos de Sandy se notaron desde Washington DC, la capital del Gobierno, hasta Nueva York, centro financiero mundial, pasando por estados más al oeste como Virginia Occidental, donde se registraron fuertes nevadas, o más al norte, en Canadá, donde una mujer falleció golpeada por un cartel que arrancó el viento.


En Atlantic City (estado de Nueva Jersey), por donde penetró el centro de la tormenta, las inundaciones y las olas, amplificadas por las mareas, inundaron zonas residenciales y barrieron el famoso paseo marítimo, dejaron la ciudad a oscuras y obligaron a emitir un toque de queda hasta las 6 de la mañana. Nueve estados, el Distrito de Columbia y un condado de Carolina del Norte se enfrentaron al primer embate de la tormenta en estado de emergencia y paralizados a la espera de que pasaran las aguas torrenciales y los vientos.


No hay comentarios:

Publicar un comentario